Participación en II Simposio Brasilero de Libertad Religiosa
La directora del Centro, profesora M. Elena Pimstein, fue invitada a exponer en el II Simposio Brasilero de Libertad Religiosa, organizado por el Centro Internacional de Derecho y Religión (ICLRS) de la Universidad Brigham Young y el Centro Brasilero de Estudios de Derecho y Religión de la Universidad Federal de Uberlandia. Dicho encuentro se realizó en la ciudad de Brasilia entre el 8 y 10 de agosto.
El tema central fue, "Construyendo puentes, rompiendo barreras: El papel de la libertad religiosa en la construcción de una sociedad más libre, justa y solidaria".
La profesora Maureen Neckelmann del Instituto de Sociología UC, se refirió a la "Libertad religiosa en un contexto de cambio cultural: el caso de Chile." Destacó los cambios que se observan en la demografía religiosa, a la luz de la última Encuesta Bicentenario de 2022, en la que pese a la disminución de los católicos y la falta de adhesión institucional y el de quienes no expresan filiación religiosa, no es posible concluir que las creencias hayan desaparecido sino que han adquirido nuevas expresiones. Destacó cómo "la religión remite necesariamente a significados y símbolos comunes y más que apelar a la identidad subjetiva, constituye una forma colectiva e intergeneracional de dar sentido a la existencia y a las normas sociales.
La exposición de la profesora y directora del Centro versó sobre "La religión y las creencias en tiempos de cambios: desafíos a la luz del proceso constitucional chileno". En ella, se refirió al estado actual de dicho proceso, en especial, a la norma sobre libertad de religión y creencias propuesta por la Comisión de expertos junto con las indicaciones presentadas a ese respecto. Afirmó que "el proceso constitucional chileno develó ciertas fracturas en la sociedad chilena que están en un contexto de polarización mundial. Una Constitución no es una panacea ni resolverá por sí sola los problemas de cohesión social existentes".
Agregó que "en medio de esta sociedad plural, se advierte un rechazo a todo lo impuesto, junto con un vertiginoso avance tecnológico donde no se encuentran todas las respuestas a las preguntas existenciales. Por eso, cobra especial relevancia poner en el centro a la persona humana y detenerse en su dimensión espiritual, que lo identifica como especie y le da sentido a la vida. Así, toda Constitución debe reconocer, promover y proteger el derecho a la libertad de religión y de creencias y los demás derechos de los que depende su ejercicio. Toda la sociedad se beneficia de ello. Ello es crucial en el momento en el que vivimos", subrayó.